Cualquiera diría, oyendo al Presidente, que dentro del programa electoral del PP está el devolver la estatua del dictador a la Castellana. Pues a mí me parece que no. Dentro de la pre-pre-campaña elecotral que ha inagurado nuestro Presidente éste fin de semana, está el pasearse entre sus militantes para que el telediario nos pueda adoctrinar convenientemente de las bondades del Presidente. Porque no se engañen, el "explicar los logros de los dos primeros años de Gobierno" ha de hacerse en el Parlamento, no entre militantes. En el primer caso, se hace para todos los españoles, y en la Cámara habrá quien esté -o no- de acuerdo y muestre su discrepancia. Entre sus admiradores, no cuestiona nadie nada, y se vota por disciplina de partido. Cuando las cámaras miran, hay que aprovechar el espacio en televisión y repartir unas cuantas consignas. De ahí lo de la estatua. Y el que el Presidente no mencionase nada del ataque a un miembro de UPN. El Ministro del Interior afirma que "le faltan datos". Sí, hombre. Ese mismo político que a las 24 horas del 11-M alentaba el "queremos saber" ahora pide una semana para esclarecer dos atentados. El mismito.
Pero hablando de estatuas y logros de la izquierda, hemos de resaltar otro logro. Se llama pucherazo en unas oposiciones. Cambiar el 80% del temario a falta de 2 meses de una convocatoria para favorecer a una determinada línea... ¿qué es? ¿Un logro social de la izquierda?
